jueves, 10 de febrero de 2011

Somo

La costa cántabra es accidentada, la mayor parte del litoral está formado por acantilados que en sus entrantes recogen playas no muy grandes. La excepción la constituyen las desembocadoras de los ríos, donde se forman en varias ocasiones estuarios y bahías de gran superficie. La bahía más grande es la de Santander. En ella se produce un fenómeno geológico que se repite en otras varias ocasiones a lo largo de la costa de Cantabria: la formación de una larga flecha arenosa conocida localmente como "puntal". El Puntal de la bahía de Santander es visible desde la ciudad, constituyendo una más de las playas de ésta.


La visita de este ambientalito permite una tranquila jornada de playa, que puede ir acompañada de navegación, que puede ser simplemente como turista en la lancha de "Los Reginas", más conocidas como "las pedreñeras", que, en temporada de playa, van directamente desde el palacete del embarcadero de Santander hasta casi el lugar donde se encuentra el "Ambiental-Hito". Si es en otra época del año, deberá cogerse la lancha a Somo para desde allí hacer el recorrido a pié. En todo caso, es una excursión muy agradable que recomendamos.

El río responsable de su formación es el Miera, que en su tramo final se abre en un bello estuario conocido como Ría de Cubas o Río Cubas. En este estuario se encuentra el "Ambiental-Hito Río Cubas" que si la visita se hace en embarcación puede ser complementario de éste.

El "Puntal" se origina en la población de Somo y profundiza en la bahía de Santander, recorriendo esta hacia el interior, en dirección a la ciudad, dejando un estrecho canal de entrada a la bahía. Precisamente, la proximidad de este canal, hace que desde el puntal se disfrute ampliamente de la vista del movimiento de barcos, grandes y pequeños de entrada y salida de la bahía.


Las flechas arenosas como el puntal, se originan debido a los aportes de arena procedentes del río por una parte y del mar por la otra. La corriente del río arrastra la arena y cuando choca con las olas, ambas se contrarrestan de manera que la velocidad del agua se hace nula, con lo que los materiales transportados caen al fondo. Así, poco a poco, la flecha va creciendo desde el continente en una dirección que es el resultado de las fuerzas que se contraponen.

La arena que, transportada por el río, traspasa el final de la flecha, es enviada por las olas a formar la playa externa. Una vez allí, el viento la levanta para formar las dunas de la parte alta de la flecha, terminando por caer del otro lado para volver a ser arrastrada por el río. El resultado es que una vez formada un flecha litoral, se mantiene estable gracias a un delicado equilibrio entre arena retirada y aportada.


Las flechas arenosas forman dunas en las que se encuentra una vegetación específica, claramente adaptada a las duras condiciones de viento y escasez de suelo y agua, ya que, aunque pudiera parecer lo contrario, los suelos de las dunas son muy secos, debido a que la elevada porosidad de la arena impide que el agua de lluvia quede retenida.

La presencia mayoritaria es de una gramínea la Ammophila arenaria, aunque un buen observador encontrará otras especies interesantes.


Las flechas arenosas son ecosistemas frágiles que están sometidas a todo tipo de presión humana y en Cantabria tenemos todos los ejemplos, desde las que han sido invadidas de construcciones (Laredo), o que corren riesgo de serlo (Oyambre) a las que han sido utilizadas para extraer arena (Liencres) o a las que simplemente sufren el pisoteo de demasiados turistas (Puntal). En estas dos últimas, las tareas de regeneración y conservación de la flora se han hecho necesarias a lo largo de los últimos años.


Por otro lado, las dunas son invasoras de los territorios que se encuentran detrás de ellas, esto hace que se hayan utilizado repoblaciones de pinos para fijarlas. Precisamente en Somo y en Liencres tenemos interesantes ejemplos de estos pinares de repoblación.


El Puntal delimita con la costa un estrecho canal que debe ser dragado constantemente para mantenerlo lo suficientemente profundo para que entren los barcos. esto provoca unas alteraciones en la dinámica de la arena que se dejan sentir principalmente en la playa de la Magdalena, justo enfrente del Puntal, la cual pierde casi toda su arena cada invierno, necesitando frecuentes trabajos de rehabilitación. por el momento, parece que el Puntal no ha sido perjudicado con esta dinámica.

Autor: Fernando F. Rojero

http://www.ambiental-hitos.com/ambientalitos/puntal.htm

Pueblo: Somo
Municipio: Ribamontán al Mar
Comarca: Trasmiera
Fechas: 7-12-09 / 8-12-09 / 12-12-09

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