viernes, 29 de junio de 2018

Isla

 Iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa:
En paralelo al retablo de la capilla de San Juan Bautista y por el mismo ensamblador debió de realizarse el retablo del lado del Evangelio. En el únicamente se conserva de su imaginería original el Cristo Crucificado que lo preside, deudor de los modelos castellanos derivados de la escuela de Gregorio Fernández, aunque debido a su cronología avanzada (hacia 1690) presenta una formas más blandas y el paño de pureza con abundancia de quebraduras angulosas de escaso volumen, cercano al tipo de paño conocido como "cortado a cuchillo". Flanquean el Cristo Crucificado hoy dos figuras una Virgen Dolorosa de vestir y Santa María Egipciaca.

En el centro del banco se ha situado recientemente una imagen de Santa Filomena, talla de madera, actualmente vestida. En su origen se representó a la santa como una sirena, siguiendo una leyenda sobre la vida, pero al no parecer coherente con la fe católica, se mandó cortar la cola y añadirla dos pies. Esto explica la forma poco natural en la que está representada. No hemos podio saber de cuando viene la devoción a Santa Filomena, pero no puede ir mucho más allá de mediados del siglo XIX, cuando renace su devoción, al encontrarse supuestamente sus restos en las catacumbas de Roma.

-I. Cofiño Fernández. K. Mazarrasa Mowinckel, J. J. Polo Sánchez. La Junta de Siete Villas: Arnuero. Catálogo del Patrimonio Cultural de Cantabria, II. 2001.

Pueblo: Isla
Municipio: Arnuero
Comarca: Trasmiera
Fecha: 11-10-14

viernes, 22 de junio de 2018

Isla

Iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa:
En el testero de la capilla de San Juan Bautista (lado del Evangelio), propiedad de la familia Fernández de Isla, se incluye un retablo compuesto de cuerpo tetrástilo con columnas de fuste estriado y ático cerrado en semicírculo con encasamiento entre machones. Su cronología debe rondar la fecha de 1690.

El retablo ha conservado toda su imaginería original. Está dedicado a San Juan Bautista, presentando en relieve la escena del Bautismo de Cristo, en el encasamento principal, que muestra una clara dependencia de los modelos compositivos e iconográficos castellanos, flanqueándose de las imágenes de San Bartolomé y San Juan de Sahagún. En el entrepaño del banco se narra la escena de la degollación del Bautista y el banquete de Herodías; a ambos lados, en los netos, la imposición de la casulla a San Ildefonso, el amamantamiento místico de San Bernardo, Cristo atado a la columna, San Sebastián asistido por un ángel, la Virgen y San Juan.

En el ático se desarrolla la escena de la Visitación y, a ambos lados, las representaciones de Santo Tomás y Santa Teresa. Toda la escultura corresponde a un mismo maestro, de estilo semejante a las figuras y relieves del retablo mayor, por lo que se identifican con Andrés de Monasterio.

-I. Cofiño Fernández, K. Mazarrasa Mowinckel, J. J. Polo Sánchez. La Junta de Siete Villas: Arnuero. Catálogo del Patrimonio Cultural de Cantabria, II. 2001.

Pueblo: Isla
Municipio: Arnuero
Comarca: Trasmiera
Fecha: 11-10-14

viernes, 15 de junio de 2018

Isla

 Iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa:
En 1689 se produciría la contrucción del actual retablo mayor, que ya estaba finalizado en 1697, pues una escritura fechada el 20 de Marzo de ese año nos informa de que el dorador Simón de Haro había sido contratado por el arzobispo de Burgos, don Juan de Isla, y por don Bernardo de Isla, arcediano de Treviño y canónigo de Burgos, para llevar a cabo el dorado del retablo mayor de la iglesia por la cantidad de 25.240 reales.

Se trata de la obra más importante y compleja de cuantas se hayan llevado a cabo en Cantabria durante el último tercio de siglo. Grandioso retablo construido sobre planta ochavada, compuesto por banco, cuerpo de cinco calles y ático.

 Emplea como elemento de sustentación columnas salomónicas. Su iconografía recoge un abundante número de escenas y personajes en relieve y bulto redondo, con escenas pasionales y del ciclo del Nacimiento, así como figuras de Apóstoles, los Santos Titulares, San Miguel y la Asunción, todas piezas originales de gran calidad.

Incluye también un imponente sagrario-tabernáculo, de la misma época y estilo, pieza exenta a modo de baldaquino cupulado que se sitúa delante de un vano abierto en la sacristía, proporcionando así el efecto de transparente.

A falta de datos documentales directos resulta difícil precisar quiénes fueron sus ejecutores. Para Isabel Cofiño, Karen Mazarrasa y Julio Polo no cabe duda de que el escultor de la obra fue Andrés de Monasterio, pues su estilo impregna todas las piezas. Sin embargo, la autoría arquitectónica parece más oscura.

Su iconografía responde aún a una intencionalidad tridentina, emanada del espíritu religioso del patrono que la sufraga, de ahí el abundante número de escenas y personajes. En los entrepaños del banco se desarrollan las escenas de la Entrada Triunfal a Jerusalén, la Última Cena, la Oración en el Huerto y el Prendimiento.

 Los Cuatro Evangelistas se sitúan sentados a plomo junto a las columnas extremas del primer y segundo cuerpo, mientras los Padres de la Iglesia muestran la misma postura en los netos del ático. Sobre el tabernáculo se sitúa la representación de la Fe. Seis relieves albergan las calles laterales, en lectura zigzagueante de abajo arriba, comenzando por el lado de la Epístola, se representa la Adoración de los Pastores, la Adoración de los Reyes, la Huida a Egipto, la Flagelación, el Camino del Calvario y el Descendimiento.

 San Pedro y San Pablo flanquean el tabernáculo, con la consabida escena de la Resurreción en  la puerta del sagrario. El Arcángel San Miguel y San Juan Evangelista acompañan en el segundo piso las figuras titulares de San Julián y Santa Basilisa.

Por último, la figura de la Asunción y Dios Padre rematan el conjunto desde un ámbito celestial, sugerido por la presencia de ángeles músicos; junto a este encasamento sendas piezas heráldicas evocan el patronazgo del arzobispo Fernández de Isla.

Las imágenes de bulto muestran un canon alargado, actitudes movidas, perfiles abiertos, composiciones en diagonal y plegados de paños abundantes con numerosas quebraduras no muy profundas. Todas ellas denotan una clara dependencia de los modelos castellanos.

-I. Cofiño Fernández, K. Mazarrasa Mowinckel, J. J. Polo Sánchez. La Junta de Siete Villas: Arnuero. Catálogo del Patrimonio Cultural de Cantabria, II. 2001.

Pueblo: Isla
Municipio: Arnuero
Comarca: Trasmiera
Fecha: 11-10-14

viernes, 8 de junio de 2018

Isla

Iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa:
La capilla de la Concepción y San Juan Bautista, propiedad del arzobispo Fernández de Isla, se realizaría a la vez que el resto del edificio, ya estando erigida en 1690. Se trata de una capilla realizada sobre planta cuadrangular en el primer tramo de la nave del Evangelio, y cuenta con su propia sacristía. En el muro Norte de la capilla se labró un lucillo tardoclasicista compuesto de un cuerpo principal con arco de medio punto entre pilastras de orden corintio y remate con frontón curvo, pirámides sobre netos, volutas geométricas y en el centro gran escudo del arzobispo Fernández de Isla. En el interior del lucillo se encuentra un sarcófago neoclásico con monolito y armas de los condes de Isla Fernández.

-I. Cofiño Fernández, K. Mazarrasa Mowinckel; J. J. Polo Sánchez. La Junta de Siete Villas: Arnuero. Catálogo del Patrimonio Cultural de Cantabria, II. 2001.

Pueblo: Isla
Municipio: Arnuero
Comarca: Trasmiera
Fecha: 11-10-14

viernes, 1 de junio de 2018

Isla

 Iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa:
Todo parece indicar que las obras emprendidas a finales del siglo XVII fueron una verdadera reconstrucción, más que una simple consolidación y ampliación. Esto mismo parece confirmar la obra conservada que, tanto exterior como interiormente, mantiene una perfecta homogeneidad constructiva.

 Como es lógico, el arzobispo don Juan Fernández de Isla para diseñar y dirigir la obra pensaría en alguno de los mejores maestros arquitectos del momento, muy especialmente en quien figuraba en la nómina del arzobispado como maestro mayor y veedor de obras de arquitectura, que no era otro que Francisco del Pontón Setién.

 Fue precisamente Francisco del Pontón Setién uno de los maestros que llevó a cabo la reconstrucción de la iglesia de Isla. En abril de 1688 se le cita, junto a Bernabé de Hazas, como maestros de la obra.

 A partir de este momento la iglesia de San Julián de Isla, que ahora pararía a denominarse con la doble advocación de San Julián Y Santa Basilisa (tradición burgalesa), recuperaría para Cantabria un modelo parroquial de salón (hallenkische), propio del siglo XVI hispánico que habría de inspirar a los seguidores de Francisco del Pontón Setién y Bernabé de Hazas la construcción de nuevas iglesias parroquiales en las Asturias de Santillana, en el occidente de la actual Cantabria (Comillas, Terán, Cabezón de la Sal...).

A mediados del año 1691 se estaba trabajando en "el cerramiento de las capillas de esta iglesia", es decir en los abovedamientos, como atestigua el fallecimiento por accidente del cantero de Galizano Cosme de la Riva cuando estaba trabajando en ella.

-I. Cofiño Fernández, K. Mazarrasa Mowinckel, J. J.Polo Sánchez. La Junta de Siete Villas: Arnuero. Catálogo del Patrimonio Cultural de Cantabria, II. 2001.

Pueblo: Isla
Municipio: Arnuero
Comarca: Trasmiera
Fecha: 22-04-12/4-07-15/10-09-16