De fines del siglo XIX y principios del XX son unas casas en las carretera, algunas de ellas vistosamente pintadas de rojo.
"La tienda-bar de mi pueblo quedaba a unos veinte metros de la casa de mis abuelos. Allí, de niño, me mandaban mis tías a hacer la compra, con la cartilla en la mano, y unas de propina para pipas o chicles".
"Patro y Pedro, los propietarios del negocio, apuntaban el pedido y a principios de mes se lo cobraban a los viejos. Para mí, aquella tienda era como un safari, siempre con emociones frescas".
"Allí había un futbolín, cajas apiñadas por todos los lados, un sinfín de productos que se ponían a la venta, botellas de alcohol de años imposibles de descifrar, legumbres, hortalizas, bacaladas enteras, partidas de cartas, cubalibres con mezclas ahora impensables y alguna que otra mosca que caía suicidada en un colgajo de color amarillo que pendía del techo".
"Allí estaba el teléfono público, el único del pueblo, al que se llamaba desde Santander en caso de urgencia. El encanto de aquella tienda era sublime".
"Todavía hay unas cuantas tiendas-bar en Cantabria y en todas, por cierto, se sirven los mejores blancos de solera del país".
- Miguel Ángel Aramburu-Zabala Higuera. Liérganes. Catálogo del Patrimoniio Cultural de Cantabria I (2000).
- Diego Ruiz. https://www.eldiariomontanes.es/v/20131123/sociedad/cantabria-mesa/tienda-20131123.html
Pueblo: Barrio de Rubalcaba
Municipio: Liérganes
Comarca: Trasmiera
Fecha: 21-02-16
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